La finalidad principal de los talleres de vida autónoma es formar a las personas con Síndrome de Down y discapacidad intelectual en la realización de actividades básicas de la vida diaria para fomentar su vida autónoma.
Un aspecto fundamental en la vida de las personas con síndrome de Down o con otras discapacidades intelectuales lo constituye el desarrollo de su autonomía personal y su orientación hacia la vida independiente.
Es evidente que, para poder progresar de manera importante en esta dirección, los jóvenes van a precisar de oportunidades adecuadas y de apoyos adaptados a sus características; dicho de otra manera, van a necesitar una formación orientada a la inclusión y a la vida autónoma e independiente, unas oportunidades adecuadas en diferentes contextos (educativo, laboral, social) y un sistema de apoyos centrado en sus necesidades y en sus expectativas.
Las dificultades de una persona con discapacidad tienen su origen en sus limitaciones personales, pero también y sobre todo en los obstáculos y condiciones limitativas que aparecen en el propio contexto familiar y la sociedad, estructurada en base al patrón de la persona que responde al tipo medio. Dentro de estas limitaciones, la posibilidad de desarrollar una vida independiente es quizás una de las que mantiene todavía mayores lagunas.
Las familias con hijos con Síndrome de Down corren un alto riesgo de caer en la sobreprotección, por lo que habrá que trabajar con ellas en la asunción de riesgos que podrían favorecer a la larga la autoestima y auto regulación de sus familiares con discapacidad.
Incluiremos así a las familias en el proceso de formación, haciendo talleres conjuntos de manera mensual, en los que puedan ver los avances que están realizando sus familiares y depurar posibles roles de sobreprotección, y ser también capaces de identificar en qué momentos y tareas sus familiares necesitarían apoyo a la hora de iniciar la vida independiente.
La experiencia de aprender habilidades para vivir interdependientemente es el primer paso para la vida autónoma y permite a las familias pensar en un futuro con más tranquilidad comprobando las habilidades necesarias y necesidades reales de sus hijos.
En este programa se consideran aspectos relevantes para trabajar la privacidad, la autonomía en la organización, promover el orden, y la asunción de responsabilidades domésticas y de responsabilidades personales.
OBJETIVOS DEL PROGRAMA.
El objetivo general es ofrecer oportunidades de aprendizaje de las tareas necesarias para la vida en el hogar. Estas tareas incluirán habilidades inherentes a la vida independiente como la responsabilidad personal, autorregulación, planificación y ejecución de las actividades para el mantenimiento del hogar.
Con respecto a la familia, perseguimos lograr los siguientes objetivos:
– Aumentar la confianza en las capacidades de sus hijos para desempeñar tareas del hogar y adquirir habilidades de vida independiente
– Evolucionar hacia un estilo de comunicación y relación de adulto – adulto
– Colaborar estrechamente con el equipo profesional para facilitar el desarrollo del programa.
Los objetivos específicos que pretendemos que alcancen las personas participantes en el proyecto son:
– Adquirir y generalizar hábitos de autonomía en el hogar.
– Aumentar la responsabilidad en las tareas del hogar.
– Mejorar su autoestima y su autodeterminación.